Un grupo de empresarios se entrevistó con el presidente de la Câmara Municipal quien se ofrece a dar todas las facilidades a las compañías de Monte Faquiña, amenazadas por un incremento del canon por encima del 1000%
Un grupo de empresarios de Mos y Vigo se reunió ayer con el presidente de la Câmara Municipal de Valença, José Vaz Carpinteira, para estudiar un posible traslado de sus empresas (actualmente en los polígonos de Monte Faquiña – Mos- y Cotogrande y O Gorxal – Vigo-) ante la presión de las comunidades de montes de Tameiga y Cabral. En el caso de las empresas asentadas en Mos se trata de ya del segundo encuentro en los últimos meses ante la presión de las empresas en buscar nuevos emplazamientos de seguridad jurídica.
Los contactos iniciados meses atrás por empresarios de compañías asentadas en Monte Faquiña con la Câmara Municipal de Valença do Minho para estudiar un hipotético traslado de sus instalaciones al Norte de Portugal son cada vez más intensos, dada la inamovible postura de la Comunidad de Montes en Man Común de Tameiga de incrementar considerablemente el canon que pagan estas empresas por los terrenos que ocupan.
En la reunión también estuvieron presentes empresarios de la parroquia viguesa de Cabral, donde ya un juez de primera instancia de Vigo falló a favor de la Comunidad de Montes para que varias empresas del polígono de O Gorxal entregasen sus terrenos a los comuneros. Desde Aemos han mostrado su preocupación porque en Cabral acabe ocurriendo lo mismo que en Monte Faquiña y esta sentencia abra la puerta a una situación de inestabilidad e inseguridad hacia la propiedad privada. En Vigo hay 300 trabajadores afectados por esta situación.
En ambos casos, la problemática surgió a raíz de que los tribunales otorgaran la propiedad del suelo que ocupan las compañías a las comunidades de montes. «Los comuneros de Tameiga decidieron no respetar las condiciones de los contratos fijados en su día por el Concello de Mos con las firmas empresariales, que realizaron millonarias inversiones para poner en marcha sus actividades bajo la premisa de contar con un canon determinado y una duración de la concesión suficiente para garantizar la amortización del negocio», explican los empresarios, «Muchas de ellas se encuentran ahora con que sus concesiones caducan, sin que se respeten siquiera los acuerdos alcanzados con el Concello para prorrogarlas, y que la entidad comunal pretende imponer un canon totalmente desorbitado e inasumible».
Al encuentro de ayer asistieron representantes de compañías como Grupo Redcom, AG Turismo, Dalot, Exclusivas Cotogrande o Juan Lumbreras, así como el gerente de la Asociación de Empresarios de Mo (Aemos), Francisco Domínguez. Por parte portuguesa estuvieron presentes el nuevo presidente de la Cámara de Valença do Minho, José Vaz Carpinteira, y un técnico municipal. La reunión sirvió para constatar la vigencia de la disponibilidad ya mostrada el pasado septiembre por el anterior presidente, Manuel Lopes, para facilitar el asentamiento de las empresas gallegas. Es más, indicaron que tras el cambio de gobierno derivado de las últimas elecciones locales, incluso se pusieron sobre la mesa otras posibilidades de suelo más allá de las directamente dependientes de la administración municipal.